En su doble condición de presidente argentino y titular de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), Alberto Fernández participó de forma virtual de la XIV cumbre de los BRICS. Por ahora, la Argentina fue como invitada pero eso podría cambiar pronto.
El Gobierno estaría en tratativas de sumar al país a este grupo de economías en vías de desarrollo y contaría con el apoyo de dos integrantes: China y Brasil. Esto le daría acceso al Banco de Desarrollo de los BRICS (BND), cuyo programa de financiamiento proyectado para el período 2022-2026 alcanza los 30 mil millones de dólares.
Durante la cumbre de Partidos Políticos, que funciona como una previa al encuentro principal, Fernández manifestó que para Argentina «los BRICS son una excelente alternativa de cooperación frente a un orden mundial que viene funcionando para el beneficio de unos pocos».
En ese sentido, afirmó que «los países emergentes y en vías de desarrollo tenemos desafíos comunes y no encontraremos soluciones avanzando en soledad».
No es la primera vez que se rumorea que la Argentina podría entrar en el organismo, pero esta vez pareciera haber una intención firme de China para que nuestro país ingrese al BRICS, además de que un eventual triunfo de Lula en las elecciones de Brasil también sería importante para que se concrete.
Las puertas que se abrirían
En el Gobierno consideran que, con la necesidad cada vez más marcada de conseguir nuevas vías de financiamiento, hay dos herramientas vigentes que el BRICS podría proporcionar: el Banco de Desarrollo de los BRICS (BND) y el Acuerdo de Reservas de Continencias (ARC).
El BND es clave a la hora de apuntalar los déficits de infraestructura y desarrollo sostenible que tienen los países emergentes. Con las dificultades para acumular reservas y con demoras en los desembolsos previstos por los organismos multilaterales, aparece como una opción atractiva para la Argentina.
Por otro lado, los swap también parecen estar bajo estudio del equipo económico para reforzar las tenencias del Banco Central. Meses atrás, se confirmó que China revisará el acuerdo vigente para ampliarlo.
En esa misma línea, el ARC, que nació para fortalecer la red de protección financiera mundial, podría aportar su cuota. Este acuerdo cuenta actualmente con intercambios que alcanzan los 100 mil millones de dólares enfocados en enfrentar una eventual crisis de liquidez y en contener la volatilidad de los mercados ante la retirada de estímulos monetarios.
Con el más que probable apoyo de China a la intención de Argentina de sumarse a los BRICS, el proceso de adhesión podría darse rápido e incluso anunciarse el año que viene. Brasil, otro socio clave, también apoyará la moción. No obstante, el acceso a las líneas de crédito podría comenzar este mismo año.
Fuente: Ámbito Financiero.
