El ministro de Economía Sergio Massa anunció hoy un nuevo dólar agro que establece un tipo de cambio fijo, diferencial y temporal de $300 para las exportaciones de soja. Este esquema forma parte de la tercera etapa del Programa de Incremento Exportador a partir del cual se habían implementado los llamados dólar soja 1 y dólar soja 2 en septiembre y diciembre del año pasado, respectivamente.
El nuevo tipo de cambio será implementado a partir del lunes 8 de abril y tendrá vigencia hasta el 31 de mayo para el sector sojero. En el caso de las economías regionales, el esquema de tipos de cambio diferenciados se extenderá hasta el 30 de agosto. Una vez transcurrida dicha fecha, caducará la posibilidad de liquidar las exportaciones a un tipo de cambio más elevado. No hubo anuncios sobre modificaciones en el tipo de cambio para el turismo y la exportación de servicios.
El acuerdo alcanzado con los sectores agroexportadores estima un monto mínimo de US$ 4000 millones dentro del plazo establecido. Este nuevo dólar agro, a diferencia de los anteriores -dólar soja 1 y dólar soja 2,- alcanza una mayor cantidad de sectores exportadores. También, el nuevo valor, se encuentra por encima de los dos tipos de cambio que lo precedieron -$200 y $230, respectivamente-.
El ministerio de Economía implementará “medidas paliativas para enfrentar la peor sequía de la historia argentina”, con un criterio de simplificación y automatización para 69 mil productores afectados. Según Massa, dicha automatización abarca la suspensión de ejecuciones fiscales, ejecuciones bancarias y percepciones o adelantos de impuestos que cobra el Estado.
Para que las empresas puedan adherirse a dicho Programa deben cumplir con una serie de requisitos -condiciones de elegibilidad-. Aquellas firmas que deseen acceder a este tipo de cambio diferenciado deberán sumarse al programa Precios Justos para garantizar el abastecimiento del mercado interno cumpliendo con precios máximos. También deberán comprometerse a mantener los niveles de empleo vigentes que, al día de hoy, se encuentran en 380 mil puestos de trabajo. A su vez, Economía sancionará a aquellas empresas que no hayan cumplido con la liquidación de divisas generadas a través de los esquemas anteriores. Se estima que el monto ronda los US$ 3.700 millones y alcanza a más de 100 empresas. Dentro de estas sanciones se encuentra la suspensión del CUIT si estas empresas no se ajustan a derecho dentro de los próximos 30 días.
Según Joaquín Waldman, economista de Equilibra e investigador del CONICET, “la sequía generó un impacto de magnitud histórica para las reservas netas del banco central. Además, el ingreso de divisas se está viendo perjudicado porque, a lo largo del primer trimestre, faltaron las exportaciones que se habrían hecho si no se hubieran vendido los productos a causa del dólar soja 1 y 2 de septiembre y diciembre del año pasado. De esta manera, los ingresos extraordinarios que ayudaron a (sobre)cumplir la meta con el Fondo están perjudicando el actual flujo de divisas”. “A su vez, los rumores sobre nuevos tipos de cambio diferenciales para el sector agroexportador hacen que los productores resguarden sus granos a la espera de que dichos rumores se confirmen” concluyó.
¿Cuáles son los sectores alcanzados?
La implementación de este nuevo tipo de cambio alcanza, también, a las economías regionales que, desde hace tiempo, venían reclamando algún esquema que contemple sus necesidades. De esta manera, el nuevo dólar agro beneficia a los sectores exportadores de tabaco, yerba, té, cítricos, arroz, maderas, vitivinícola, maní, entre otros.
Previo al anuncio de la medida, algunos gobernadores manifestaron su postura con respecto al tema. Según el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, “es una medida necesaria para ayudar a productores afectados en este momento difícil”. “Entre Ríos tiene una gran diversidad productiva, y los daños que produjo la sequía han sido muy graves. Tenemos que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para apoyar a nuestros productores y cuidar las fuentes de trabajo. Trabajando en equipo vamos a superar esta situación.”
El pasado lunes, el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó el informe completo de la cuarta revisión del acuerdo con el país en el cual alertó sobre la elevada inflación y pidió un paquete de medidas “más sólidas” para combatirla. Si bien el organismo accedió a flexibilizar la meta de acumulación de reservas -tiene que sumar US$ 6.800 millones hasta junio- el impacto de la sequía sobre la economía argentina es de suma gravedad ya que la exportación de productos derivados del agro es el principal ingreso del país. Se estima que, a causa de las inclemencias climáticas, la economía argentina dejará de percibir alrededor de US$ 20.000 millones. Según un informe del Banco Central de la República Argentina (BCRA), durante el primer trimestre del año, las reservas registraron una caída de USD 5.538 millones respecto a diciembre del año pasado.
Gita Gopinath, primera subdirectora gerente del FMI, sostuvo que “alcanzar el objetivo de déficit fiscal primario del 1,9% del PIB para 2023 sigue siendo esencial para respaldar la desinflación y la acumulación de reservas, aliviar las presiones financieras y fortalecer la sostenibilidad de la deuda”. El anuncio del dólar agro tiene como objetivo atacar las tres aristas que menciona el informe del Fondo: reservas, déficit fiscal e inflación.
Fuente: Ámbito.