En la última década los relanzamientos de juegos clásicos fueron moneda corriente. ¿Qué casos realmente valieron la pena y cuáles fueron un desastre?
Lo que comúnmente llamamos remaster es el reescalado a 1080p (Full HD) y por lo general a 60 cuadros por segundo de juegos de definición estándar. También puede haber remasterizaciones de títulos que ya estaban en HD pero esta vez con un lavado de cara importante, como es el caso del GTA V o The Last Of Us.