El Ejército de Israel bombardeó más de 15 edificios de Beirut anoche en una nueva ofensiva que tuvo como objetivo la estructura financiera de Hezbollah en el Líbano.
El ataque estuvo destinado a oficinas y sucursales de la entidad financiera Qard al Hasán, utilizada por el grupo libanés para pagar los salarios de los soldados que combaten en la guerra con Israel.
Los bombardeos fueron por todo el territorio del Líbano, pero se concentraron especialmente en Beirut y en el sur del país, dado que son los lugares donde había más oficinas de Qard al Hasán.
El Ejército israelí aseguró en un comunicado oficial que Hezbollah almacena miles de millones de dólares a su nombre en las sucursales de la entidad, que luego utiliza no solo para pagarle a sus miembros, sino también para comprar armas.
El ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, publicó en su cuenta de la red social X (exTwitter) una imagen de una explosión en un edificio de la capital libanesa acompañada del mensaje “Beirut en Llamas”.
“Se observaron incendios masivos sobre Beirut, ya que más de 15 edificios fueron alcanzados por las advertencias de evacuación a los residentes. Hezbollah ha pagado y seguirá pagando un alto precio por sus ataques al norte de Israel y sus lanzamientos de cohetes. Seguiremos atacando al representante iraní hasta que se derrumbe”, agregó Katz.
El Ejército israelí aseguró que sus ataques van dirigidos a “degradar” al grupo chií y a impedir que se recomponga, después de un mes de intensos ataques en Líbano que han dejado más de un millar de muertos.
Poco antes, las fuerzas israelíes habían lanzado avisos a la población libanesa para que se alejaran de las sucursales de la entidad, ya que pronto serían atacadas. “Vamos a atacar el poder económico de Hezbollah”, aseguró en una rueda de prensa el principal portavoz del Ejército, el contralmirante Daniel Hagari.
Además de los bombardeos, las tropas israelíes continuaron con su invasión del sur de Líbano, donde el domingo localizaron y desmantelaron armamento del grupo chií almacenado junto a la frontera, como lanzacohetes o explosivos, y mataron a varios combatientes “incluidos comandantes” de la milicia.
Desde que Israel lanzó su ofensiva terrestre en el sur de Líbano en la madrugada del 1° de octubre, al menos 24 soldados israelíes han muerto en ataques en la frontera (16 en territorio libanés y otros 8 en territorio israelí). También han muerto cuatro civiles en Israel.
En Líbano han muerto más de 2.448 personas en más de un año de fuego cruzado. La mayoría de las víctimas se produjeron en el último mes, e Israel asegura que más de 1.500 son milicianos.
Fuente: TN