2008 fue un año tenso en Argentina. Cristina Fernández de Kirchner, quien había ganado las elecciones presidenciales del 2007, asumía su primer mandato.
Una de sus primeras medidas fue anunciada por su entonces ministro de economía Martín Lousteau el 11 de marzo del 2008. Ese día, el gobierno anunciaba un nuevo esquema de retenciones móviles a las exportaciones de granos, medida que llevó a un paro del campo sin precedentes en la historia argentina.